MILITOS, HOY, AQUÍ.
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En este intercambio de cosas buenas que nos tenemos los hermanos, hoy Militos aparca hoy su alforja de pensamientos y sueños, para mostrarnos a todos, una vez más el camino. Ya conocemos a Militos toda una pionera en abrir sendas de luz, para encaminar nuestros pasos a la mejor de las metas.
Por eso, hoy con todo el gusto, publicamos aquí este hermoso relato dedicado a todos los blogueros anónimos que estamos en la aspiración de un mundo mejor.
Por eso, hoy con todo el gusto, publicamos aquí este hermoso relato dedicado a todos los blogueros anónimos que estamos en la aspiración de un mundo mejor.
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EL SUEÑO POSIBLE
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"Os voy a contar un bonito sueño que tuve esta noche.
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Subía jesús a una montaña alta con Pedro, Santiago y Juán. Tú, querido bloguero desconocido, te habías colado allí con permiso del Maestro. Él te colocó detrás suya para que los demás no te descubrieran, de manera que pudiste contemplar toda la escena bien de cerca, no perdiste ni un detalle porque estabas al lado mismo de Jesús, casi te transfiguraste al mismo tiempo que El; le viste resplandeciente, todo gloria; y aquella voz del Padre Eterno llegó a tí antes que a sus tres elegidos: "Este es mi Hijo amado, escuchadle". Casi te pareció que aquellas palabras se referían a tí. En el fondo creo que eran para los dos.
.Descubriste a Elías y a Moises en amigable charla con Jesús. ¡Qué suerte la tuya!. A mi Moisés siempre me fascinó, qué fuerza, qué empuje, qué confianza en Dios para conducir a ese pueblo, elegido, pero de tan dura cerviz y cabezota probablemente como tú y seguramente como yo.
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Subía jesús a una montaña alta con Pedro, Santiago y Juán. Tú, querido bloguero desconocido, te habías colado allí con permiso del Maestro. Él te colocó detrás suya para que los demás no te descubrieran, de manera que pudiste contemplar toda la escena bien de cerca, no perdiste ni un detalle porque estabas al lado mismo de Jesús, casi te transfiguraste al mismo tiempo que El; le viste resplandeciente, todo gloria; y aquella voz del Padre Eterno llegó a tí antes que a sus tres elegidos: "Este es mi Hijo amado, escuchadle". Casi te pareció que aquellas palabras se referían a tí. En el fondo creo que eran para los dos.
.Descubriste a Elías y a Moises en amigable charla con Jesús. ¡Qué suerte la tuya!. A mi Moisés siempre me fascinó, qué fuerza, qué empuje, qué confianza en Dios para conducir a ese pueblo, elegido, pero de tan dura cerviz y cabezota probablemente como tú y seguramente como yo.
Aunque, eso de la dura cerviz, a veces no es un defecto, de hecho puede ser muy buena para no dejarse manipular. Eso lo sabemos bien, tu y yo.
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Seguí, un rato más, en aquel maravilloso escenario. Más tarde te peleaste con Pedro, que ya te había descubierto pegado al Señor. El motivo fue porque él, egoista, quería construir una tienda y quedarse para siempre en la montaña y menos mal que Jesús salió en tu defensa y con la mirada le reprochó su actitud porque había mucho trabajo de almas abajo del monte. Tú ya lo habías comprendido desde el principio, sabías que aquel momento, esperanzador y glorioso, era sólo cómo un anticipo de lo que nos aguarda después de ganar la última batalla. Jesús te abrazó con fuerza, querido bloguero desconocido, porque se dió cuenta de que tú, le entendías mejor que Pedro y Santiago.
Juan, mientras tanto sonreía divertido y te miraba con cariño, pero Pedro seguía enfurruñado. El Salvador del mundo que ya estaba impaciente por bajar, para seguir amando y enseñando al pueblo de la dura cerviz, tomó tu mano y dijo a todos:
"No contéis a nadie lo que habéis visto, hasta que el Hijo del Hombre resucite de entre los muertos".
Mas tú, querido bloguero anónimo, arrebatado por todo lo que acababas de vivir, en voz baja, para que Pedro no lo oyera preguntaste:
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Seguí, un rato más, en aquel maravilloso escenario. Más tarde te peleaste con Pedro, que ya te había descubierto pegado al Señor. El motivo fue porque él, egoista, quería construir una tienda y quedarse para siempre en la montaña y menos mal que Jesús salió en tu defensa y con la mirada le reprochó su actitud porque había mucho trabajo de almas abajo del monte. Tú ya lo habías comprendido desde el principio, sabías que aquel momento, esperanzador y glorioso, era sólo cómo un anticipo de lo que nos aguarda después de ganar la última batalla. Jesús te abrazó con fuerza, querido bloguero desconocido, porque se dió cuenta de que tú, le entendías mejor que Pedro y Santiago.
Juan, mientras tanto sonreía divertido y te miraba con cariño, pero Pedro seguía enfurruñado. El Salvador del mundo que ya estaba impaciente por bajar, para seguir amando y enseñando al pueblo de la dura cerviz, tomó tu mano y dijo a todos:
"No contéis a nadie lo que habéis visto, hasta que el Hijo del Hombre resucite de entre los muertos".
Mas tú, querido bloguero anónimo, arrebatado por todo lo que acababas de vivir, en voz baja, para que Pedro no lo oyera preguntaste:
- "¿Y no puedo contar un poco, sólo un poco en mi blog?".
Pedro lo escuchó y se encaró contigo:
- "¿Qué es eso de un blog?"El Maestro se echó a reír y respondió:
- "Ya lo sabrás, ya lo sabrás... Vosotros mismos, cuando yo no esté, tendréis también un blog para que los que me sigan, en un mundo venidero, sepan lo mucho que los he amado".
Te miró con amor entonces, y dándote un pequeño y cariñoso caneo en la nuca te dijo:
- "Tú sufrirás con el Hijo del Hombre. Te he elegido para "com-padecer" conmigo, pero a cambio me ayudarás a traer a mi lado a muchas ovejas perdidas. Y vale, tienes mi permiso para que algo de lo que hoy has visto lo cuentes en tu blog".
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En ese momento me despertó un gallo saludando a la aurora, y me quedé sin ver como bajabais del monte y si Jesús te llevaba aún de su mano, que seguro que ya no te la ha soltado hasta el día de hoy.”.
Te miró con amor entonces, y dándote un pequeño y cariñoso caneo en la nuca te dijo:
- "Tú sufrirás con el Hijo del Hombre. Te he elegido para "com-padecer" conmigo, pero a cambio me ayudarás a traer a mi lado a muchas ovejas perdidas. Y vale, tienes mi permiso para que algo de lo que hoy has visto lo cuentes en tu blog".
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En ese momento me despertó un gallo saludando a la aurora, y me quedé sin ver como bajabais del monte y si Jesús te llevaba aún de su mano, que seguro que ya no te la ha soltado hasta el día de hoy.”.
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Querida Mili, creo que he “pillado” tu mensaje, por eso mi sueño será desde ahora, procurar que nuestros blogs sean siempre vehículos de su Amor entre los hombres.
¿No es hoy internet, el núcleo de cualquier actividad humana? Entonces ahí ha de estar nuestro sitio, como decía San Josemaría, debemos “poner a Cristo en la cumbre de todas las actividades humanas”, ¡Que gran ideal para un blog!. Para mi y para ti, bloguero/a anónimo/a.
¿No es hoy internet, el núcleo de cualquier actividad humana? Entonces ahí ha de estar nuestro sitio, como decía San Josemaría, debemos “poner a Cristo en la cumbre de todas las actividades humanas”, ¡Que gran ideal para un blog!. Para mi y para ti, bloguero/a anónimo/a.
PPPPPerdonar..
1 comentario:
Más bonito no puede ser.
No lo conocía. Y ya lo creo que lo hacéis bien. De maravilla.
Muchos besiños agradecidos de martes.
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