Queridos amigos: soy consciente de que llevo tiempo, mucho tiempo, escribiendo sólo de Arcendo y es que no puedo hacer otra cosa, la cabeza y el corazón no me dan para más..., sin embargo, hoy siento la necesidad de pediros una oración nueva para mi hija María. Algunos ya la conocéis porque en varias ocasiones he solicitado vuestro apoyo por las distintas operaciones a que se ha visto sometida que nada tienen que ver con el fatídico cáncer, quedaos tranquilos.
Su problema es el corazón y sus arritmias, precisamente lleva ingresada desde el mismo día de la Misa de Arcendo, por eso no pudieron asistir ni ella ni Julio con lo mucho que lo deseaban; mi marido porque le apreciaba de verdad y María porque sabía lo mucho que nuestro querido amigo había rezado siempre por ella. A mí no me dejaron ir al hospital porque, según ellos, no podía faltar a ese encuentro de oración y alabanza a Dios por el Capitán. Con el corazón divido, como tantas veces en mi vida, fui a acompañar a su familia, a darles mi apoyo y cariño, aunque si habéis leído el post anterior ya sabéis quien salió de aquella sagrada Misa más confortada.
En cuanto a María, estamos preocupados porque tienen que hacerla lo que se llama "Cardioversión eléctrica,"un choque en el corazón, de esos que vemos en las películas y que ya ha sufrido otras dos veces, con algún riesgo. El problema es que no acaban de hacérselo, alegando que no saben si tiene la aurícula izquierda o derecha muy dilatada, cuando ya hace unos meses la hicieron una ecografía del corazón y dio la izquierda. Ella cada vez está más alterada y deprimida, lo que la está perjudicando.
María es la única de mis hijos que vive con nosotros; ella y su hijo, Ángel de 20 años (otro de la familia muy querido y rezado por Arcendo). Como ya os he dicho, ha pasado por varias operaciones de distinta índole, algunas muy complicadas. Yo no sé si el Capitán, desde el Cielo, nos enviará una ayudita, espero que sí, pero echo mucho de menos su apoyo directo que siempre tenía en estas situaciones.
A mis años, cada vez me sorprenden más las cosas de Dios, sé que es mi Padre, nuestro Padre, y sólo podemos esperar de Él lo mejor para cada uno y con el ejemplo de Arcendo ¿quién puede objetar nada? Pero de un tiempo a esta parte, vengo comprobando que estas cosas nunca me suceden de una en una, por ejemplo, nada más enterarme de la enfermedad de mi amigo del alma, me comunican el cáncer de mi sobrina, mucho peor que el suyo.
En enero operan a Arcendo y a los dos días a mi sobrina, con el agravante de que tienen que extraerle la mayor parte de su organismo, no quiero resultaros demasiado cruda, pero es la realidad..., Es verdad que lo está pasando muy mal, reingresando con frecuencia, pero consigue remontar por unos días para volver a caer. Dios dirá, ella lucha como una jabata, la queremos mucho y pendiente de ella estamos a todas horas.
Fallece quien fue mi primer y más querido amigo, mi apoyo en todo, mi Capitán, y al mismo tiempo, mi hija que siempre estuvo en la oración de Arcendo, recae con su problema de corazón de forma más aguda.
En este paradigma de "dos mejor que una" he llegado a pensar que Dios que tanto me ama, lo quiere así para que no me desmorone entregándome al dolor de una sola desdicha, para que me mantenga activa ocupándome de lo siguiente. Vosotros: ¿Qué opináis?
Por favor, queridos amigos, rezar para que puedan llevar a cabo esa "Cardioversión eléctrica" en el corazón de María y todo salga bien.
En la Capilla del Hospital donde se encuentra, hay un mural con esta frase:
"Creer es poder"
Gracias, gracias, a todos