ESPERANZA Y LA POLÍTICA

El pasado 29 de mayo publiqué un post con este mismo título. Por la noche decidí enviarlo al borrador, cuando ya lo habían leido algunos. Esta acción mía me acarreó la desaprobación cariñosa de dos queridos blogger, femenino y masculino. Esta noche, después de comprobar que nuestro intrépido Hartos nos ha abandonado por motivos personales, dejándonos sin derecho al pataleo porque no se admiten ya comentarios, he decidido rehacer el post dejando la esencia y borrando sólo lo que era un berrinche. Berrinche del que explico la causa:
Me puso de los nervios comprobar cómo, por lo ocurrido en el juicio entre Gallardón y Losantos, los que antes gritaban: Esperanza, Esperanza..., se volvían contra ella porque no había dado la cara. Y si se piensa en frío ¿cómo iba a dar la cara a favor de Losantos?. Si no se ha ido del PP, como le insinuo Rajoy que hiciera. ¿Es que podía hacer otra cosa?. A mi parecer, que nunca he sido del PP y que sólo lo voté, como muchos otros, para echar al de la ceja cuyo único objetivo es el de sacarse de la manga una España a su medida, Aguirre salió bastante airosa del paso. Ni siquiera mintió descaradamente, escurrió el bulto con inteligencia. Y no es que a mí me guste esa manera de actuar pero yo no me dedico a la Política y ella sí.

La Política es así, no hay más. Esos son los políticos y tampoco hay más. Y el que quiera Democracia tiene que recurrir a ellos. Y como en este país, sólo se puede apoyar a los partidos mayoritarios porque ¡válgame Dios!, ¿ a quién se le ocurre afiliarse o simplemente ponerse al lado de partiduchos que no aglutinan a la mayoría? y que, porque lo dice la prensa o a mí me da en la nariz, son la extrema derecha, fascistas, franquistas, nazis... . Y deben tener razón porque ir contra el aborto sin supuestos que valgan, o contra los llamados matrimonios de homosexuales, o a favor a ultranza de la Religión Católica, de la familia y la libertad de enseñanza sin paliativos... es demasiado sospechoso. Pues eso, ¿Que hacemos?. Construir una democracia sin partidos que yo sepa no se ha inventado todavía.

Que Esperanza, la última Esperanza ¿nos ha fallado también?. ¿Qué es cómo todos?, ¿cómo Soraya, cómo Rajoy?. Los ciudadanos tenemos voz y libertad para decir lo que queramos y lo que buscamos. Pero las urnas son un filtro que no deja colar muchas de nuestras aspiraciones. Y cómo no hay otro camino que las urnas, de nada vale desmontar de sus pedestales a aquellos en los que, un día antes, teníamos puestas las ilusiones, y desmontarlos por un quítame allá esas pajas.

Y yo digo, porque quiero decirlo, que Esperanza es una mujer con todas las de la ley. Podemos ponerla todos los peros que queramos, para eso es una política, pero ella sigue valiendo para presidenta. Lo que hace falta es que se sienta apoyada, que, por lo que he oido, ya cuenta con los avales suficientes para presentarse y desbancar a todos. No va a girar a un lado o a otro, segun el viento que sople porque tiene firmeza, porque tiene principios, porque está preparada y porque además cuando habla no lo hace con papeles, aunque los tenga en la mano, nunca recurre a ellos para expresar unas ideas que no le han sido dictadas al dedillo por otros.
No hay más, Democracia es Política. Y mirar hacia adelante, sin olvidar el pasado pero sin anclar en él, como ha dicho Esperanza Aguirre.

Y no es que esté contenta o que me guste esta política que tenemos en España. Y no me gusta porque está viciada, como para mi pesar está viciada la Constitución. ¿Por qué? porque las dos han sido elaboradas con la ausencia de Dios.