LA MEDIDA

Ya que hemos hablado de los santos que el mundo actual necesita, voy a leer unas palabras de Teresa de Calcuta. Quien quiera leerlas conmigo aquí están, para suavizar un poco estos días tan calurosos de final de Junio y reflexionar antes de emprender el éxodo de las ciudades.

La beata Teresa de Calcuta nos habla de esa cruel enfermedad que sufre el hombre de nuestra era: LA FALTA DE AMOR.


OS MEDIRÁN CON LA MISMA MEDIDA CON QUE HAYÁIS MEDIDO A LOS DEMÁS

"Para cada enfermedad existen varios medicamentos y varios tratamientos. Pero mientras que no se ofrezca una mano llena de ternura y un corazón generoso dispuestos a amar con cariño, no creo que se pueda curar nadie de esa terrible enfermedad que es la falta de amor.

Nadie entre nosotros tiene el derecho de condenar a nadie, sea quien sea. Y esto es verdad, aunque veamos gentes hundirse por el motivo que fuera. ¿No nos invita jesús mismo a no juzgar a nadie?. A lo mejor somos responsables de que esta gente esté donde está. Debemos comprender que son hermanos y hermanas nuestras. Este leproso, este borracho, este enfermo son hermanos nuestros porque ellos también han sido creados para un amor más grande. ¡No lo olvidemos nunca!. Jesucristo se identifica con ellos cuando dice:"Cuando lo hicisteis con uno de esos mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicisteis.

Tal vez esta gente se encuentra en la calle, sin amor alguno y sin atención de ninguna clase porque nosotros le hemos negado nuestra ayuda, nuestro cariño. Se cariñoso, infinitamente cariñoso con el pobre que sufre. No sabemos nada de sus sufrimientos. Lo más duro es saber que uno no es aceptado".
BEATA TERESA DE CALCUTA

Las Hermanas Misioneras de la Caridad tienen su Hogar de Acogida en la calle Segovia de Madrid y en otras ciudades como Barcelona y Sabadell. Y en estos hogares acogen a Ancianos, Enfermos de Sida. Y comedores donde a diario almuerzan los pobres que allí se acercan. Colaboran con ellas un grupo de voluntarios.
En una ocasión, me contaron de unos padres que decidieron celebrar la Primera Comunión de su hijo en el comedor de las hermanas,de la calle Sevilla, dando ejemplo de austeridad y caridad ya que en lugar de derrochar una gran suma de dinero en cualquier restaurante, lo entregaron al Hogar de estas religiosas.

Definición formulada por la propia Teresa de Calcuta sobre su orden:

" Somos más que nada religiosas. No somos trabajadoras sociales, ni maestras, ni enfermeras, ni doctores. Somos hermanas religiosas, sirviendo a los pobres en nombre de jesús".
El postulador para la causa de su beatificación dijo que el amor que vivió la Madre Teresa no era sólo para admirar, sino que es posible imitarlo, empezando a nuestro alrededor.