ASUNCIÓN DE MARÍA

El 15 de Agosto la liturgia celebra la Asunción de la Virgen en cuerpo y alma a los Cielos. Entorno a esta conmemoración, la mayoría de pueblos y ciudades de España celebran sus fiestas patronales bajo distintas advocaciones marianas: la Virgen de la Paloma, nuestra Señora de Begoña, Nuestra Señora de la Estrella, nuestra Señora del Alba... En Galicia casi cada pueblo tiene su fiesta particular en honor de la Señora: la Virgen del Castro, la Virgen del Mar en Cedeira, la Pastoriza en la Coruña...

No es necesario seguir nombrando los distintos nombres que María recibe en nuestras tierras, el pueblo llano abre sus viejos arcones para lucir los trajes regionales y sus mejores galas, llenando de colorido y alegría el paisaje de una tierra que, pese a quien pese, es esencialmente mariana.

No hace demasiado tiempo Juán Pablo II nos exhortaba a acercarnos a la Madre del Redentor como al pilar fuerte que contrarreste el derrumbamiento de la civilización cristiana.. Y así como María fue insustituible en los comienzos del Cristianismo continua siéndolo en esa recistianización de la sociedad de la que ninguno de nosotros debemos desertar.

Podemos preguntarnos ¿Qué me va a mi una humanidad futura, cristiana o no? Por muchas deformaciones doctrinales o morales que observemos a nuestro alrededor hemos de reconocer que decir cristiana, cristiana de verdad, es decir una humanidad en paz. Y que nadie me salga que si la Inquisición o las Cruzadas, estamos hablando de hoy, no me sean retrógados, aunque de aquello también habría mucho que matizar. ¿Qué utilidad están demostrando las grandes Conferencias y reuniones internacionales si cada vez se desatan más guerras y altercados entre paises. ¿De qué sirven, si el corazón del hombre de la calle está cargado de odio y resentimiento?

Son muchos los callejones que hoy nos parecen sin salida, pero ún buen especialista de enfermedades del alma detecta enseguida la calentura producida por la auténtica epidemia o endemia, si se quiere, de las almas que constituyen el organismo humano y social del mundo . La gravísima enfermedad es el camino erróneo de brutal separación de Dios que ha elegido el hombre de hoy y cuya meta final será su autodestrucción. ¿Cómo desandar lo malamente andado? Como siempre la solución a todos los males de las criaturas está en la madre, rara es la madre que de una manera u otra no encuentra el remedio para el dolor del hijo. Cuánto más la Madre de nuestro Redentor , Omnipotencia Suplicante, Ella podrá asistirnos en todas las dificultades materiales y espirituales que se nos presenten, a nivel personal y a nivel universal.

Disfrutemos sí con nuestras fiestas del quince de Agosto, pero acerquémonos a María con la sencillez de la primera infancia, enseñemos o recordemos a familiares, amigos y conocidos aquellas sencillas costumbres marianas de las que nuestra tierra hacía gala. ¿Quién no recuerda las tres Avemarías de la noche que hasta los más descreídos acostumbraban a rezar antes de dormir; el rezo del Angelus que detenía la labor en los campos de España y que hasta los pintores inmortalizaron; el Ave María Purísima que abría las puertas no blindadas de los hogares? o ¿El rezo del santo Rosario en familia cuando la televisión no era la reina de la casa?

El camino está bien señalizado y como la aurora, la Estrella de la mañana está ya emitiendo sus luces para el nuevo día de la Humanidad.

Acogernos a Ella o seguir en las tinieblas, no hay otra alternativa.

¡¡¡ Felicidades a las Asunciones que lean este post!!!