A DIOS LO QUE ES DE DIOS

Cardenal Arzobispo de Madrid, Monseñor Rouco Varela

Después de su total entrega a la causa de Cuba, Raquel pudo celebrar la Confirmación de su hijo Alejandro con mayor felicidad, ella y yo, aún que la que le proporcionó el evento cubano, porque sólo las cosas de Dios colman ese ansia de lo infinito que el alma lleva dentro.

ESTA FOTOGRAFÍA CREO QUE HABLA POR SÍ SOLA

Raquel y Alejandro

Con alguno de vosotros he comentado que, mientras nuestros hijos y nuestros nietos continuen recibiendo los Sacramentos, el mundo seguirá los pasos que Dios tiene programados, por muy mal que, a primera vista, vaya todo. Y no os preocupéis si alguno de los nuestros es abandonadito en este terreno, las madres y las abuelas, los padres y los abuelos, tenemos todo el tiempo del mundo para arrancar a Dios, por medio de su Madre, toda la gracia que se necesite para cambiar al más pintado.

La Confirmación se celebró en la Parroquia, San Pedro Martir de Alcobendas, que a su vez pertenece al Teologado de Dominicos de ese lugar. Esta parroquia, la primera de estilo vanguardista que se construía en Madrid, fue un proyecto del arquitecto Miguel Fisac, entre los años 1955-58. La construcción, segun recuerdo, fue bastante llamativa y mereció opiniones encontradas por la novedad de sus formas. Fisac es autor de varias iglesias y reveló que lo que él buscaba con sus templos, era dejar constancia de una nueva Jerusalen.

El Crucifijo es una talla de madera suspendido en alto.

El templo tiene forma hiperbólica, dividida en dos partes a ambos lados del Altar que separa a los fieles del coro de los religiosos.

Para mi lo más admirable son las vidrieras que, en estas fotografías, no se ven bien, pero tienen unos colores y unos matices que cuando el sol las atraviesa son dignas de contemplar. Comprendo que toda la obra de Fisac es monumental, pero he de reconocer que, al menos a mi, no inspira tanta devoción como los templos más clásicos.
Simplemente es mi opinión.

La ceremonia de Confirmación si fue emotiva y clásica, como todo Sacramento bien recibido y bien administrado.

Monseñor Rouco Varela, habló en su homilía de los signos externos e internos de los Sacramentos y de cómo aquellos hechos históricos vividos por los discípulos de Cristo, tienen que ver con Dios y con los hombres de todos los tiempos. La Pasión y Resurrección de Cristo traía la paz más allá de la muerte de los hombres. Los apóstoles recibieron del mismo Cristo la facultad de perdonar los pecados, de ese pecado que es enemigo de la paz. Si no existiese el pecado no habría guerras ni males en el mundo. Y, entre otras cosas, animó a los noventa y seis confirmandos a pensar que cuando Jesucristo se fue al Padre fue como hombre y como hombre, Hijo de Dios está a su lado en el Reino de los Cielos, de la misma manera que nosotros, hombres. hijos de Dios estaremos con Él.

Creo que esta idea de Cristo/Hombre en el Cielo, merece la pena interiorizarla.

He de confesar que cada vez que un nieto mío recibe un Sacramento, Bautismos, comuniones, Confirmaciones... me siento como renovada por dentro y doy gracias a Dios constantemente por ser tan generoso conmigo que nunca fui capaz de hacer algo grande por Él, también me digo:

¡¡VALIÓ LA PENA!!

Otro de mis nietos, Angel, de diecisiete años

Alejandro, de catorce años, al salir de la celebración.


Alejandro en la Iglesia

Los dos primos juntos

Un corto video realizado por la orgullosa madre

EL PUESTO DE MADRINA SE LO CEDÍ A LA ABUELA PATERNA PORQUE YO TENÍA BASTANTE CON ESTE REGALO DE DIOS