¿ERES UN BUEN EVANGELIZADOR?

Para ser o intentar ser un buen evangelizador, hay que seguir estos diez consejos que nuestro  Papa Francisco dejó en el Congreso Internacional sobre la Catequesis, celebrado recientemente  en Roma, válidos para todo aquel que quiera dar a conocer a Jesucristo:

 

_Ser, no hacer de: "Catequistas, no trabajar de catequistas. Eso no vale!

 

_Primero el testimonio: "Ser catequista o evangelizador, significa dar testimonio de la fe, ser coherente con la propia vida. Y esto no es fácil  San Francisco de Asís decía a sus frailes: "Predicad siempre el Evangelio y si fuese necesario, también con palabras."

 

_Partir de Cristo: " Ser catequista o apóstol, requiere amor a Cristo, cada vez más fuerte, amor a su pueblo santo. Partir de Cristo significa tener familiaridad con Él.

 

_Ante el Sagrario: " Cuando vas al Señor, miras el tabernáculo ¿Qué haces? ¿Tú te dejas mirar por el Señor?... ¿Dejo que su fuego enardezca mi corazón? Si en nuestro corazón no existe el calor de Dios, de su amor, de su ternura ¿cómo podemos nosotros pobres pecadores, enardecer el corazón de los demás?

 

_Al encuentro del otro: "Mientras más te unes a Jesús y Él se vuelve el centro de tu vida, más Él te hace salir de ti mismo, te descentraliza y te abre a los otros... Donde hay verdadera vida en Cristo hay  apertura hacia el otro"

 

_Sin miedo: Partir de Cristo significa no tener miedo de ir con Él a las periferias, no tener miedo de salir de nuestros esquemas para seguir a Dios, porque Dios va siempre más allá"

 

_Ser creativos: La creatividad es como la columna del ser catequista. Dios es creativo, no es cerrado. ¡Dios no es rígido! Nos acoge, nos viene al encuentro, nos comprende.

 

_El riesgo de apoltronarse: "De la comodidad, de la mundanidad en la vida y en el corazón, de concentrarnos en nuestro bienestar, si las cosas, el dinero, lo mundano se convierten en el centro de la vida, perdemos nuestra propia identidad."

 

_Hacer memoria de Dios: "El catequista, el evangelizador, es quien custodia y alimenta la memoria de Dios, la custodia en sí mismo y sabe despertarla en los demás... para todo cristiano, la fe contiene precisamente la memoria de la historia de Dios con nosotros, la memoria del encuentro con Dios.

 

_Sin quitar ni añadir nada: "El catequista, el evangelizador es un cristiano que pone esta memoria al servicio del anuncio: no para exhibirse, no para hablar de sí, sino de Dios, de su amor, de su fidelidad. Hablar, transmitir todo lo que Dios ha revelado, es decir la doctrina de su totalidad, sin quitar ni añadir."

 

Extraído y algo resumido del Semanario "Alfa y Omega,"jueves 3 de octubre de 2013