Cuando La Hoja del Arce se metía en temas políticos, también acertaba, ya, ya...puede que sea demasiado "forofa," pero que le vamos a hacer, es que además, aunque los políticos que nos gobiernan en la actualidad no son los del 2008, año en que el Capitán publicó este post, las cosas no han cambiado de manera notable. Es cierto que la Economía parece que mejora, bajo el crisma de la Comunidad Europea, pero los políticos siguen gobernando en bien de sus partidos y no al servicio del pueblo, ni mucho menos por el bien común.
En fin amigos blogueros, cambiar los nombres y me daréis la razón con algunos matices.
Domingo, 24 defebrero de 2008
TEORÍA POLÍTICA. LA BUSQUEDA DE LO MEJOR
Cuando los tibios y pasotas se apresuran a soltar la coletilla, de "todos los políticos son iguales" a mí me entra la risa.
¿Como se podría calificar lo que hace Zapatero?.
Dicen que la política es el arte de lo posible.... ¿Se podría adjetivar a este tuercebotas como artista?, ¡nunca!. Si acaso como chapucero y hacedor de lo imposible.
Esto no es política, es protopolítica al uso, acertada definición del político y pensador español, Gonzalo Fernández de la Mora.
El primer gran teórico de este modo de proceder, sin duda fué, Nicolas Maquiavelo, pero indudablemente exponiendo sus tesis con mucha más inteligencia y brillantez que los mentecatos que ahora dicen gobernarnos.
A Maquiavelo, debemos una colección de consejos en parte intuitivos y en parte experimentales, sobre el modo de acceder al "principado" y mantenerse en él. Maquiavelo en sus planteamientos hizo caso omiso de lo moral (igualito que Zeta), para concretarse en lo técnico.
A grandes rasgos, la protopolítica maquiavélica se desarrolla en dos puntos básicos, que, sin duda podréis ver reflejados en las actuaciones de este desgobierno:
Punto 1. Al poder se llega por la violencia o por la astucia.
Punto 2. Para mantenerse hay que valerse del engaño (diplomacia), y de la guerra (estrategia).
Lo que ocurre es que estas consideraciones maquiavélicas sólo han sido útiles, de verdad a caudillos y dictadores.
La protopolítica, es una mezcla de intuiciones e instintos y poco ha servido, a mi modo de ver, en el desarrollo de las democracias. El panorama hoy es muy distinto, actualmente un "manual del candidato", podrá tomar prestadas ciertas enseñanzas de "El Príncipe", pero no puede, mejor dicho, no debe, racionalizar la obtención del poder con aquellos métodos.
Si la protopolítica es la cota cero de la "cosa pública", el político puro debe valorar al pueblo y su entorno, transcendentalizando la sociología y dándole valor único: EL SERVICIO; es por ahí cuando un político real justo y moderno, encuentra la justicia y cuando el pueblo, que en las democracias es soberano, puede otorgarle su beneplácito para poder gobernar.
Así, de una manera u otra, y frente a la mediocridad imperante, vuelvo a mentar la posibilidad, para algunos anacrónica, sobre la necesaria resurrección de la aristocracia del espíritu y la recuperación de ciertos valores fundamentales. No al estilo de El Príncipe maquiavélico, sino al modo, como ya dije entonces, que muchas de nuestras mentes más preclaras como Juan Ramón Jimenez o José Ortega y Gasset, vislumbraron:
Aristocracia: aristos, el mejor y krátos, poder; es decir “el gobierno de los mejores”, y no de estos pelanas.
¿Como se podría calificar lo que hace Zapatero?.
Dicen que la política es el arte de lo posible.... ¿Se podría adjetivar a este tuercebotas como artista?, ¡nunca!. Si acaso como chapucero y hacedor de lo imposible.
Esto no es política, es protopolítica al uso, acertada definición del político y pensador español, Gonzalo Fernández de la Mora.
El primer gran teórico de este modo de proceder, sin duda fué, Nicolas Maquiavelo, pero indudablemente exponiendo sus tesis con mucha más inteligencia y brillantez que los mentecatos que ahora dicen gobernarnos.
A Maquiavelo, debemos una colección de consejos en parte intuitivos y en parte experimentales, sobre el modo de acceder al "principado" y mantenerse en él. Maquiavelo en sus planteamientos hizo caso omiso de lo moral (igualito que Zeta), para concretarse en lo técnico.
A grandes rasgos, la protopolítica maquiavélica se desarrolla en dos puntos básicos, que, sin duda podréis ver reflejados en las actuaciones de este desgobierno:
Punto 1. Al poder se llega por la violencia o por la astucia.
Punto 2. Para mantenerse hay que valerse del engaño (diplomacia), y de la guerra (estrategia).
Lo que ocurre es que estas consideraciones maquiavélicas sólo han sido útiles, de verdad a caudillos y dictadores.
La protopolítica, es una mezcla de intuiciones e instintos y poco ha servido, a mi modo de ver, en el desarrollo de las democracias. El panorama hoy es muy distinto, actualmente un "manual del candidato", podrá tomar prestadas ciertas enseñanzas de "El Príncipe", pero no puede, mejor dicho, no debe, racionalizar la obtención del poder con aquellos métodos.
Si la protopolítica es la cota cero de la "cosa pública", el político puro debe valorar al pueblo y su entorno, transcendentalizando la sociología y dándole valor único: EL SERVICIO; es por ahí cuando un político real justo y moderno, encuentra la justicia y cuando el pueblo, que en las democracias es soberano, puede otorgarle su beneplácito para poder gobernar.
Así, de una manera u otra, y frente a la mediocridad imperante, vuelvo a mentar la posibilidad, para algunos anacrónica, sobre la necesaria resurrección de la aristocracia del espíritu y la recuperación de ciertos valores fundamentales. No al estilo de El Príncipe maquiavélico, sino al modo, como ya dije entonces, que muchas de nuestras mentes más preclaras como Juan Ramón Jimenez o José Ortega y Gasset, vislumbraron:
Aristocracia: aristos, el mejor y krátos, poder; es decir “el gobierno de los mejores”, y no de estos pelanas.
2 comentarios:
Sí, de plena actualidad. Clarísimo.
Feliz día de la Virgen del Rosario y que Dios te bendiga, querida mensajera.
Besiños.
Ocho años después seguimos rodeados de pelanas. A ver si surge un partido de políticos con valores fundamentales que no traicionen.
Publicar un comentario