Vaya por delante mi repulsa rotunda y absoluta ante el brutal acto de terrorismo ocurrido en Francia y ante cualquier suceso semejante, pero tampoco puedo callar mi recriminación a lo que bajo el derecho a la libertad de expresión, se amparan los ataques descarnados hacia cuanto es sagrado para muchas personas, por muy cariz humorístico que se le quiera dar.
Como alguien me ha comentado, más que libertad de expresión se debería llamar "libertad al insulto." Y sí, en este caso concreto me estoy refiriendo a la revista Charlie Hebdo que maldita sea la gracia que tiene. Ya digo que no justifico en absoluto la respuesta terrorista de la Yihab, pero de todos es sabido la constante provocación de estos periodistas contra lo más sagrado que tenemos muchas personas, ya que también han publicado caricaturas grotescas sobre la Santísima Virgen en el momento del parto por el que nació el Redentor y otras sobre la Santísima Trinidad.
Si bien es verdad que a los católicos semejantes provocaciones nos llevan antes que nada a desagraviar por ellas, es de justicia mostrar nuestra repulsa públicamente y exigir que, si los propios periodistas del humor, por llamarles de alguna forma, no lo hacen, alguien ponga freno LEGAL a tales desmanes que son un insulto y ataque a la intimidad más honda de quienes vivimos lo sagrado.
Está claro que, para los tales libertarios de expresión, no existe nada sagrado en sus vidas y en el fondo dan pena porque sólo les mueve lo material y el lucrarse monetariamente a costa de ofender sentimientos y creencias de las personas, precisamente las que darían sus vidas y la están dando por honrar y testimoniar su fe religiosa en pleno siglo XXI, ante la pasividad de organismos internacionales que supuestamente han sido erigidos en defensa de los derechos humanos.
Mi pésame y mi oración, más profunda y sincera, por las víctimas y familias de las personas asesinadas por los terroristas de la Yihad en el país vecino de Francia.
¡¡¡Descansen en paz!!!
4 comentarios:
Sí, Militos, sí; acabo de mirar la revista que nos dejas, no la conocía. Y, sí, es un insulto, es una blasfemia gráfica. Me duele, hasta en lo más profundo de mi ser.
Le pido a Dios que nos ayude a todos, que nos ayude a perdonar, a escucharnos, a mirarnos, a comprender que todos somos sus hijos, a amarlo, que nos ayude...
Gracias, por estar aquí, querida amiga
Besiños del alma.
Esa es la diferencia, nosotros respondemos con el perdón, el desagravio y poniendo la otra mejilla. No se puede usar el ojo por ojo, pero estoy contigo en que bajo la libertad de expresión, se entra en un mundo donde se puede pisotear a muchos.
Os recomiendo este video sobre lo dicho cuando las tornas se cambian
clica aqui
Amen Militos,que descansen en paz.
Estoy muy de acuerdo con tu entrada.
Como pecamos contra Nuestro Rey y projimo con nuestro libre albedrio.
Senor,perdonales pues no saben lo que hacen...perdoname a mi tambien.
Un besito y mil bendiciones.
Te dejo besiños de domingo.
¡Buen día!
Publicar un comentario