LA AVENTURA DE LA VIDA

No sé si a alguien le ha sucedido, en alguna ocasión, algo parecido a lo que a mi me ocurre en estos momentos. Algo así como un desinfle moral, después de haber vivido acontecimientos felices y hasta exultantes. Vivir en tensión, tensión de la buena, es lo que tiene. Pues en esa texitura es en la que me encuentro y creo que se habrá notado.
Son muchas las emociones que en menos de un mes han pasado por mi corazón y mi cabeza, primero el 50 aniversario, seguido la llegada de hijos y nietos pequeños a este rincón de Noray, donde pasamos las vacaciones y que, curiosamente, cuando aún no eran padres a ninguno les gustaba...¿Por qué será?

Celebramos cuatro cumpleaños, Gonzalito de un año, Sara de dos, Carmen de dos y Ángelito de cuatro. La piscina se llenó de globos, lloros y risas... y restos de unas gafas que cayeron en manos de una de las cumpleañeras que, como para todos los niños, es su juguete preferido, sobre todo si la propietaria es la abuelita. Otro de los motivos por los que he estado ausente.


¿SABIÁIS QUE AHORA VENDEN GAFAS DE SOL PARA BEBÉS? ¿Y QUE ESTÁN MÁS TIEMPO EN EL SUELO QUE EN LA NARIZ DE LOS PEQUES?

PRIMERA TARTA DE GONZALITO

CARMEN QUE SE NEGÓ A SOPLAR Y SARITA QUE LO HIZO POR LAS DOS

ANGELITO Y SARA

¡¡TARDE DELICIOSA DONDE LAS HAYA!!

Yo encantada, pero al límite del agotamiento y eso que mis hijas toman las riendas, de casi todo, en sus manos. Ahora que se ha marchado la mayoría, de golpe me cae encima el apachuchamiento.

Para combatirlo lo único que se me ocurre es dejaros un fragmento de la homilia que nos dedicó nuestro querido Juan Manuel, dominico del que ya hablé dos post más abajo.

HOMILÍA
"Dicen que la vida es como una singladura. Una oportunidad unica e irrepetible para emprender un viaje hacia la felicidad. Un viaje en el que siempre se navega hacia adelante. No hay posibilidad de retorno. Salimos de un puerto y sólo cabe aventurarse hasta llegar al puerto de destino.


Dicen los entendidos que no es fácil echarse a la mar. Antes de zarpar se necesita un plan , un objetivo, un ideal por el que luchar y arriesgar la vida, un espíritu valiente, lleno de coraje, , tesón, perseverancia y, por supuesto, se necesita mucha fe para no quedarse en el camino y poder seguir luchando hasta el final. En la travesía ¡cuántos planes, cálculos, esfuerzos y luchas por mantenerse a flote siguiendo nuestro curso! ¡Y qué curioso! En el fondo, a pesar de todo nuestro esfuerzo y planificación, parece como si...algo misterioso se empeñase siempre en marcar nuestro rumbo por derroteros improvistos e inciertos. Es la aventura de la vida. Una aventura , en la que siempre es mejor embarcarse con un buen compañero, alguien con compartir las alegrías y las penas, alguien por quien luchar y entregarse...

Sinsabores, tristezas, dolor... son cosas que nunca faltan. Y cuando llegan sólo cabe aceptarlas como parte inevitable de nuestra vida, sabiendo siempre que adversidades y contratiempos no son la meta del viaje, sino algo que superar. Después de la tormenta siempre viene la calma y vosotros, acaso como nadie, sabéis que para los que aman a Dios, todo les sirve para bien. Julio, Militos, los dos nos enseñáis a luchar por unos valores, por un amor sublime, por una familia, por unos hijos, por unos nietos.

¡Enhorabuena! Celebrar cincuenta años de fidelidad, entrega, amor, sacrificio...no está al alcance de todos. No hay duda de que entre vosotros hay alguien que os mantiene unidos con una fuerza indestructible. Y bien sabéis que ese alguien no es otro que nuestro Dios bueno y misericordioso que os ayuda con la fuerza de su Espíritu divino."

Y con unas cuantas palabras de alago y cariño terminó su homilía que leo y releo para no olvidarla.

ESPERO QUE OS GUSTE Y OS DÉ ÁNIMOS, CÓMO A NOSOTROS, PARA SEGUIR NAVEGANDO POR LA AVENTURA DE LA VIDA