No sé la causa ni el motivo que hoy me ha llevado a reflexionar sobre el Purgatorio, aunque puede que sí, ya que es lunes y la Iglesia es el día que dedica a la devoción de las Benditas Almas del Purgatorio.
La verdad es que conocemos poco del Purgatorio, ya hay personas que no creen en su existencia, aunque en este tema hay gustos para todos, otros han eliminado también el Infierno. Los que seguimos el Magisterio de la Iglesia creemos en los dos con la certeza que nos da la fe que profesamos.
Precisamente esa certeza debe movernos a fomentar, en nosotros y en los demás esa sanísima devoción para intentar con los medios a nuestro alcance aliviar las penas de estas benditas almas, teniendo en cuenta que ellas no pueden hacer nada por sí mismas y en cambio a nosotros nos pueden ayudar en muchas ocasiones, tanto espirituales como materiales.
Por la Iglesia Católica, infalible, sabemos lo tremendo de sus sufrimientos por esa imposibilidad temporal de estar ya gozando de Dios y tenemos en nuestras manos acortar ese tiempo de purgar que tiene cada una, con nuestras oraciones en concreto por familiares fallecidos o amigos o bien por ellas en general y sobre todo, con el ofrecimiento de la Santa Misa e Indulgencias, plenarias o parciales, que se ganen.
Contaba San Josemaría que solía rezar por aquella alma del Purgatorio que estuviera más cerca de la puerta del Cielo y que llegado el momento contaría con ellas para que le sacaran a él del Purgatorio, claro que también decía en otra ocasión que debíamos intentar con nuestra propia vida sacrificada saltarnos el Purgatorio a la torera.
Mi costumbre es pedir siempre por el alma del Purgatorio que esté más cerca de la puerta y por aquella otra más necesitada porque no tiene quien la rece o porque su tiempo de purgar es más largo . Aliviar a estas almas que ya tienen asegurada su salvación eterna, aunque estén penando por un tiempo largo o corto, es una obra de misericordia, de amor a los hermanos. Al mismo tiempo esa ayuda revierte en bien nuestro, ya que son muy poderosas ante Dios y pueden concedernos, a través de su padecer, muchas gracias y ayudas que las pidamos, esto si es un trueque que merece la pena tener en cuenta y fomentarlo.
Encomendémonos a las Benditas Almas, pidiéndolas favores espirituales e incluso materiales y sobre todo para nuestra salvación y la de nuestros seres queridos.
Es una buena recomendación para cada Lunes, quizás así no nos resultará tan costoso pensar en él.
Os deseo, queridos amigos,
un feliz comienzo de semana.
3 comentarios:
Eres una gran "relaciones públicas" del cielo. Me encanta que postees sobre verdades que nunca debemos olvidar. Muchísimas gracias. Un fuerte abrazo y contentísimo de poder estar de nuevo en tu casa.
Qué buena idea, gracias. Vale, el lunes, por las almas del Purgatorio.
Me alegra ver a Ángel.
Un beso grandísimo.
Ohhhhh Miltos, me ha encantado tu post!!! Me costó mucho aceptar la existencia del Purgatorio, pero ahora lo veo taaan claro, tan necesario...
Siempre rezo por ellas... Un fuerte abrazo!!
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